Cada pedacito de Cuba tiene cosas únicas e inigualables, cosas bellas, maravillas de la naturaleza o del hombre. Sin embargo, sólo una de las regiones de Cuba puede presumir ser LA MÁS ANTIGUA. Esa…, esa zona de mogotes, tabaco y gente muy linda y hospitalaria, es Pinar del Río.
Lo que hoy se conoce como la provincia de Pinar del Río surgió en el Jurásico Medio Inferior, siendo por derecho propio la región más antigua de Cuba, además de constituir uno de sus más preciados baluartes medio ambientales.
Hace unos diez mil años comenzó a poblarse nuestra Isla. En aquel entonces, el mar se encontraba muy por debajo del nivel actual; las tierras de lo que es hoy nuestro país y de los territorios aledaños emergieron, dejando a Cuba a solo 18 kilómetros de Bahamas, lo que permitió la migración de tribus de centro y norte América hacia el territorio cubano.
La primera vez que la historia menciona una región del Occidente cubano –Guaniguanico– fue en fecha tan lejana como 1510. Si no eres pinareño o pinareña quizás este nombre no te diga mucho, pero enseguida lo ubicarás cuando te diga que en esta zona se encuentra ubicado el Valle de Viñales, con sus mogotes, unas formaciones peculiares del relieve que semejan a otras ubicadas en Asia y que prácticamente son únicas en toda Cuba.
La provincia de Pinar del Río tiene una extensión superficial de 8,854,51 kilómetros cuadrados, que sirve de habitat a poco más de 600,000 personas. Los municipios con mayor población son el de Pinar del Río (donde se encuentra la ciudad capital), Consolación del Sur y San Juan y Martínez.
El extremo este de la provincia alberga la Sierra del Rosario, con alturas superiores a los 600 metros, destacando la Loma del Seboruco, con 671 metros: la altura máxima de la Provincia. El centro sirve de asiento a la Sierra de los Órganos, donde se encuentra el muy hermoso y mundialmente famoso Valle de Viñales.
A Viñales le fue otorgada la categoría de Patrimonio Mundial de la Humanidad como Paisaje Cultural. Sólo en este lugar existe la microcycas calocoma, más conocida como la palma corcho, única en el mundo. Otra singularidad que caracteriza la región es el hecho de haber encontrado restos fósiles de determinados tipos de dinosaurios, de monos, tortugas marinas y evidencias del impacto de meteoritos.
El sistema cavernario más grande de Cuba y uno de los más grandes de América Latina, la gran Caverna de Santo Tomás, está situado en el área y cuenta con 8 niveles de más de 60 kilómetros.
Por otra parte se han encontrado enormes formaciones rocosas en los mares que bañan la península de Guanahacabibes, lo cual constituye un hallazgo para la arqueología submarina en Cuba.
La mayoría de los pinareños, vivan donde vivan en cualquier lugar del mundo, se mantienen leales a su terruño y no ocultan la alegría de ser de esta linda región. Bien, pues ahora tienen un motivo adicional para sentirse orgullosos.